Los Secretos de Gaudí
Descubre la Sagrada Familia, donde los aspectos tecnológicos y constructivos actuales se utilizan para complementar los antiguos, en el artículo Los secretos de Gaudí por Arturo Campos.
La Basílica de La Sagrada Familia en Barcelona, La última de la Grandes Catedrales, diseñada por Gaudí desde finales del Siglo XIX y que continúa en construcción en sus etapas finales, es una obra mágica, donde se funden en la actualidad los aspectos tecnológicos y constructivos más modernos con la manera de construcción antigua, casi medieval de picapedreros, maquetistas o caldereros.
Estas técnicas modernas abarcan softwares de modelado en computadora como rhinoceros, Cadds5, Catia y CAM, que permiten elaborar geometrías complejas y su fabricación asistida por computadora para los diseños de cada uno de los elementos que se construyen en la actualidad. En la construcción se utiliza el denominado industria 4.0 que ayuda al montaje de los componentes de las torres. Se utiliza en la actualidad también para el proceso de diseño la realidad virtual, desarrollando modelos 3D que se recrean en gafas de realidad virtual. Así como Laser Scan para la conservación de zonas antiguas.
Sin embargo, más allá de lo que podemos ver a simple vista en esta magnífica obra, esto que nos atrapa al mirarla y observar sus formas y esculturas se encuentra escondido, algo que no vemos sino escuchamos, quizá sin darnos cuenta pero nos envuelve en una historia de sonidos, colores y recorridos.
Durante mi época en la Sagrada Familia aprendí a verla, a entender sus formas geométricas de paraboloides e hiperboloides, y entendí porque Gaudí decía que su mejor maestro era el árbol en la esquina de su taller, las formas orgánicas cobran vida en el interior del Templo y crean un bosque encantado, donde las altas columnas estriadas son los troncos que, a través de su capitel se transforman en ramas y el techo es el follaje, con la luz natural que invade el interior de la iglesia y se difunde como en un bosque por sus hojas.
Pero además de esta comprensión visual, descubrí a través de todos los estudios acústicos que realicé de la obra de Gaudí, junto con el arquitecto acústico Francesc Daumal, catedrático de la UPC, director de mi tesis de doctorado y gran impulsor del estudio de la acústica arquitectónica y de Gaudí, que más allá de lo que podemos ver está lo que podemos escuchar. Los estudios acústicos no solo de la Sagrada Familia sino de toda la obra de Gaudí fueron hechos con tecnología de medición utilizando sonómetros integradores, mediciones de sonido por emisiones in situ y software como Symphonie, donde se procesaron todas las mediciones grabadas, interpretando tiempos de reverberación y niveles de sonido equivalente en las distintas obras de Gaudí.
Los estudios acústicos de toda la obra de Gaudí fueron hechos con tecnología de medición, utilizando sonómetros integradores, mediciones de sonido por emisiones in situ y software como Symphonie.
Para el estudio acústico de la Sagrada Familia se elaboró una porción de maqueta con las formas de los techos de las naves y por medio del Ray Tracing se obtuvo un acercamiento de cómo la luz y el sonido se difunden en el espacio y abarcan todo el interior de la Iglesia. A partir de estos estudios podemos ver que en la Sagrada Familia encontramos un itinerario acústico conformado por lo que se percibe físicamente y también por todos los símbolos y esculturas del Templo que crean mensajes sonoros en el pensamiento.
Los ambientes generados por Gaudí, con formas y proporciones inspiradas en la naturaleza y la geometría, producen tonos musicales característicos que hacen que esta arquitectura sea única.
Los ambientes generados por Gaudí, con formas y proporciones inspiradas en la naturaleza y la geometría, producen tonos musicales característicos que hacen que esta arquitectura sea única.
Gaudí vivió en una época donde la música y los sonidos formaban parte de la vida cotidiana y conformaban la cultura de la sociedad, su espíritu sensible recogía estos elementos convirtiéndolos en arquitectura. La arquitectura y los sonidos en Gaudí, espacio y tiempo, actúan al unísono en su obra. Formas, materiales, símbolos, fantasía y realidad, conforman la gran música que se convierte en arquitectura; la arquitectura que hace música a través de notas sonoras que aporta cada espacio.
Gaudí pretendió que La Sagrada Familia asemejara un gran instrumento musical, del cual pudiera participar toda la ciudad. Tiene una acústica interna planeada; coros, órganos, campanarios y campanas, con la ubicación necesaria para que el disfrute interior y exterior del templo fuese máximo.
El misticismo sonoro de los espacios para el culto; el canto al exterior para hacer partícipe a todo el pueblo y escuchar la voz del edificio como un individuo más. Dentro de estas ideas destacaba el ímpetu por la participación popular en el canto; la palabra y la voz de coros, sacerdote y fieles se combinarían y predominarían sobre la música. Dispuso sitios para los coros según el tipo de voz y su capacidad interpretativa, se encuentran los coros de niños alrededor del ábside y se complementa el presbiterio con el coro de clérigos a un nivel intermedio mientras que los coros femeninos se ubican lateralmente a 15m de altura.
Todas estas historias de los sonidos de Gaudí y muchas más, no sólo de la iglesia sino de toda su obra, se comentan y se explican en el libro Las Voces de Gaudí, donde por medio de cuentos, de narraciones, de explicaciones de conversaciones de Gaudí con sus amigos de la época, de referencias de itinerarios sonoros reales e imaginarios podemos descubrir una forma diferente de “ver” y sentir su arquitectura.
El recorrido de la Sagrada Familia es rico en sorpresas sonoras reales o imaginarias, como las esculturas de tortugas que sostienen el peso de la fachada del Nacimiento, parecieran realmente estar vivas y moverse, o los ángeles que con sus trompetas hacen que se escuche en la mente una música celestial. Todos estos sonidos reales o imaginarios, muestran que un edificio no solo es aquello que vemos sino también lo que escuchamos, tocamos o sentimos al recorrerlo y donde cada símbolo, imagen o forma pareciera poderse escuchar, todo a través de su gran espíritu, el espíritu mismo de Gaudí.