Recuperación de los Camellones en Jardines del Pedregal
1945. El arquitecto Luis Barragán compró, junto con José Alberto y Luis Bustamante, una gran extensión de terreno al sur de la ciudad, donde proyectó una urbanización y los innovadores jardines del Pedregal de San Ángel, aprovechando la naturaleza volcánica del lugar. En el proyecto también colaboraron los arquitectos Antonio Attolini y Max Cetto, y los artistas Mathias Goeritz y “Dr. Atl”; razón por la cual la colonia tiene un valor cultural y arquitectónico que se conjuga con el ambiental, siendo los “jardines” el elemento característico que retomó Barragán para la construcción en estas áreas.
Actualmente los camellones que se encuentran dentro de la colonia Jardines del Pedregal aún conservan relictos de matorral xerófilo de palo loco (Pittocaulon praecox), sin embargo, en las últimas décadas el uso de especies exóticas, césped y la falta de conocimiento del ecosistema lo han dañado significativamente.
La importancia de conservar los relictos que aún quedan y de restaurar los que se han perdido, radica en la conformación ecológica del lugar. Actualmente en los lechos rocosos, principalmente, puede hallarse entre la vegetación introducida a ciertas especies nativas, lo que dio indicio de factibilidad de llevar a cabo un proyecto de restauración del hábitat.
Nuestro objetivo se ha enfocado en aprovechar el basalto existente que se encuentran en los camellones y devolver parte del ecosistema natural al Pedregal de San Ángel.
Debido a su particular conformación topográfica y a la proporción del espacio de 5,456.40 m2 aproximadamente, posee gran riqueza ambiental, lo cual induce a tener condiciones microclimáticas variadas que permiten que la vegetación endémica se pueda establecer fácilmente con poco sustrato.
El Plan Maestro contempla la implementación de xerojardines de vegetación nativa en puntos estratégicos que se estructuran a lo largo de los camellones ubicados en “Av. Paseo del Pedregal” y “Boulevard de la Luz”. La creación de estos jardines de piedra tiene la intención de resaltar la belleza del pedregal, educar ambientalmente y crear una identidad en el sitio. Algunos de estos espacios están diseñados para que el usuario pueda recorrerlos mientras otros están enfocados en ser puntos escultóricos que los automovilistas contemplen desde la vialidad.
El segundo eje del Plan Maestro es la preservación y conservación de áreas poco intervenidas, buscando el cuidado, mantenimiento correcto e implementando medidas de control y saneamiento de la vegetación. Además de la creación de sitios de captación de agua de lluvia y filtrarla al subsuelo naturalmente, por medio de escorrentía. Por último, situamos la creación de la “guía del jardinero” que funcionara para capacitar al personal sobre el tratamiento de especies nativas y limpieza de la piedra volcánica.
Finalmente se busca que a lo largo de los dos camellones se creen corredores ecológicos como nichos para la vegetación y la fauna que aún reside ahí.
Dichos corredores contarán con un andador para que los usuarios puedan trasladarse entre los camellones y contemplar los espacios naturales.
Como parte de las acciones para llegar a dicho objetivo, se integra un reservorio de flora nativa del pedregal que consta principalmente de Echeveria gibbiflora, Bursera faragoides, Pittocaulon praecox, Sedum moranense, Agave salmiana, Opuntia lasiacantha y Muhlenbergia robusta; esta vegetación se reproduce actualmente a través de esquejes o semillas con la intención de repoblar las áreas con especies que beneficien al ecosistema.
En cuanto a las especies nativas que encontramos en los lechos rocosos, y que se busca preservar y reproducir, son: Begonia gracillis, Echeveria mucronata, Sprekelia formosissima, Cheilanthes myriophylla, Tigridia pavonia, Dahlia coccinea, Commelina coelesti, Phlebodium areolatum, Pellaea ternifolia, entre otras.
Además de hacer la limpieza correcta de las formaciones rocosas, se busca resaltar las formaciones volcánicas en contraste con el colorido de la vegetación según la época del año.
En conjunto, los materiales que empleamos son mayormente la piedra volcánica del sitio utilizada como esculturas, guarniciones, rajueleado, además troncos de árboles y gravillas como base del jardín o andadores.
El proyecto de la “Recuperación de los Camellones en Jardines del Pedregal” busca crear conciencia de lo necesario que es implementar medidas y políticas para el cuidado de los reductos naturales que quedan en la ciudad, normalmente ignorados o intervenidos con vegetación exótica, dañando ambientalmente los espacios y perdiendo gradualmente su identidad.