Sistema de Parches Integrados
Reformulando la experiencia del paisaje productivo en San Bernardo. proyecto ganador de la convocatoria de LA fundación chilena “santiago cerros isla” 1.
Por: Francisco Walker (Jefe de equipo), Alejandra Vásquez Díaz, Juan Ramón Samaniego L’Huiller, Francisco Javier Salas Hernández, Lucas Mateluna Espinosa, Santiago Rojas Alessandri , Martín Fonck Larraín, Inés Macarena Burdiles Araneda, Francisco Chateau Gannon
ANTECEDENTES
Santiago de Chile. En el contexto actual de expansión urbana sobre zonas rurales, la transformación de los espacios productivos hacia áreas urbanizadas ha fragmentado el reconocimiento de una identidad territorial del paisaje productivo del Valle Central, históricamente retratada en la obra de artistas nacionales.
Junto al proceso de desarrollo de la ciudad los límites urbanos han cambiado, entendiéndose los espacios rurales aledaños a la zona urbana como sitios a la deriva y sus bordes como un límite rígido y divisor de una unidad de paisaje.
No obstante, dicho proceso de desintegración espacial ha contribuido a difuminar los límites territoriales y el “sentido de lugar” 2, abriendo una oportunidad para reformular el diálogo entre campo y ciudad.
Asumir la condición de encuentro entre lo urbano y rural en el paisaje puede potenciar nuevos sentidos de lugar por medio de la formulación del límite como un espacio dinámico de interacción entre ciudad y ruralidad que permitan conocer, utilizar y significar al paisaje en su conjunto.
Antes de proponer el rescate exclusivo de identidades locales vinculadas históricamente al territorio, asumir el carácter dinámico de dichas identidades en los procesos de transformación urbano-rural, permite sugerir que los espacios de encuentro en el paisaje pueden ser fuentes fundamentales en la configuración de nuevos sentidos de lugar e identificación socio-ecológica.
“Se propone la construcción de un nuevo límite entre campo y ciudad, en donde el sistema de cerros se plantee como un área de transición entre ambos mundos”.
LA VISIÓN DEL PROYECTO: EL ROL DE SAN BERNARDO EN EL PAISAJE URBANO-RURAL
Los cerros del Valle de Santiago son “cerros isla” solo en la medida en que consolidan sus límites respecto a la ciudad y en cuanto son reconocibles como unidades dentro del paisaje urbano. Son varios los casos en que la falta de protección de sus límites ha dado paso a su destrucción como piezas urbanas, los cerros Apoquindo, Dieciocho y San Luis son ejemplo de ello. Sin ir más lejos, los mismos cerros que conforman el CVSB presentan ya las primeras huellas de esta tensión entre cerro y ciudad que, en caso de no abordarse de manera adecuada, podrían sufrir un destino similar a los mencionados anteriormente.
De acuerdo al Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS100), Santiago presentará un importante crecimiento urbano, lo que impactaría directamente en la comuna de San Bernardo.
San Bernardo tiene la oportunidad de actuar como precedente en la construcción del nuevo límite entre campo y ciudad, en donde el sistema de cerros Chena-Hasbun-Adasme-Negro-Los Morros y el Río Maipo se plantee como un área de transición, a escala metropolitana y comunal, entre ambos mundos; creando a la vez un corredor de elementos territoriales que reconstruyen y reformulan la experiencia del paisaje rural y productivo del Valle Central, que es coherente con las condiciones dinámicas de la urbanización, y a la vez, público y abierto para la educación y recreación de sus ciudadanos.
SISTEMA DE PARCHES CERRO-CIUDAD
Con el propósito de instalar, además de una visión, un modelo de gestión asociado al proceso de activación y conservación del Corredor Verde de San Bernardo, se propone que este sea desarrollado como un sistema de parches sostenibles (Stepping stones) 3,
que sea realizado por etapas y que considere en el diseño los tiempos y actores de la gestión barrial, municipal y regional, así como los procesos paralelos de financiamiento y administración. Estos parches buscan construir una relación simbiótica entre cada cerro y la ciudad, integrando servicios funcionales que median entre la comunidad inmediata y el área de conservación de los elementos territoriales, a través de la formulación de parques programáticos simultáneamente recreativos y productivos.
Ver desde el cerro. La habilitación de infraestructuras de observación. Esta operación busca hacer aparecer el sistema de cerros del Valle Central a partir del reconocimiento visual de sus cumbres.
Conservar atributos paisajísticos y ecológicos. Con el fin de conservar las especies de flora y fauna nativa del Valle Central, se plantea la restauración gradual, acompañada de infraestructura educativa que permita conocer y valorar los atributos ecológicos del paisaje en el cuerpo de los cerros. Reforestación de quebradas, la delimitación de recorridos e implementación de señalética y mobiliario básico, formando con esto senderos interpretativos.
Habilitar un zócalo. Con el objetivo de conquistar las relaciones visuales entre los cerros y la ciudad se propone un anillo de movilidad para peatones y ciclistas sobre los 20 m de altura que permita posicionarse sobre las copas de los árboles y edificaciones del manto urbano. Este zócalo corresponde al límite entre el buffer y el cuerpo del cerro.
Construir buffers 4 permeables y dinámicos. Estas áreas funcionan como límites permeables que aceptan actividades de carácter recreativas, productivas y educativas de orden local y metropolitano; las cuales tienen como objetivo disminuir el impacto erosivo de la ciudad, aumentar las áreas recreativas y productivas así como potenciar la movilidad de la fauna local.
Estos buffers se conectan entre sí mediante corredores urbanos trazados sobre avenidas y calles existentes en las que se propone la renovación del perfil vial a través de ciclovías, canales, canaletas y arboledas mixtas de especies exóticas y nativas de bajo requerimiento hídrico.
Parche Hasbún: Campus San Bernardo
En la búsqueda de la innovación, educación e investigación, así como producción de carácter local, se propone la habilitación de un espacio de encuentro entre las distintas esferas de la cultura agrícola: las cooperativas locales, empresas, universidades, centros de formación técnica e instituciones estatales.
Se plantea un Campus de desarrollo e investigación que dote a diversas instituciones y agrupaciones de infraestructura adecuada ya sea educacional, empresarial, productiva y campos de experimentación.
Parche Adasme: Jardín Botánico de Santiago
Dado que la Región Metropolitana es una región significativa a nivel mundial por su biodiversidad mediterránea, se formula la habilitación del primer Jardín Botánico de Santiago que tenga la misión de preservar, investigar y exponer el conocimiento sobre las especies nativas y las características del paisaje mediterráneo, contribuyendo a la formación de la población sobre este tema.
Este programa exige la incorporación de áreas de producción de especies mediterráneas herbáceas, arbustivas y arbóreas, tales como zonas de preparación de sustratos y reciclaje de materia orgánica, invernaderos, bancos de semillas, zonas de propagación vegetativa y viveros, entre otros.
Parche Negro: Vivero Metropolitano de Santiago
Hoy la gran mayoría de las especies utilizadas para arborizar la Ciudad de Santiago son provenientes de pequeños viveros privados que no permiten abastecer proyectos urbanos de gran envergadura, lo que se traduce en un alto costo unitario de individuos vegetales que generalmente no tienen la calidad apropiada para proyectos de forestación.
A propósito de lo anterior se propone desarrollar un Vivero Metropolitano que responda a esta demanda con especies autóctonas y fitoremediadoras (especies vegetales que ayudan a mejorar y a purificar el ambiente), las cuales eduquen a los ciudadanos en la producción forestal sustentable y en la protección de las áreas verdes de Santiago.
La producción de especies fitoremediadoras crea la posibilidad de generar individuos vegetales que permitan rehabilitar sitios urbanos contaminados y micro basurales.
Parche Los Morros: Humedal Río Maipo
El manejo del agua ha constituido uno de los principales avances tecnológicos en el paisaje productivo chileno, no obstante esto, muchas veces ocurre con un alto grado de afectación de la cuenca y la biodiversidad de la ribera del río. Se plantea entonces la construcción de un tranque recreativo (humedal artificial) para la Ciudad de Santiago que permita limpiar las aguas del cauce y a la vez albergar y preservar la flora y fauna de la cuenca.
Este tranque genera un humedal artificial que concentraría una alta diversidad de especies de fauna, lo cual serviría como un elemento detonante de la restauración ecológica del paisaje del Valle Central.
“Es importante estar conscientes de que la diversidad ecológica es nuestro recurso más valioso y que los humedales constituyen el núcleo de la biodiversidad” 5.
Juan Ramón Samaniego, arquitecto y dibujante, ilustró este proyecto utilizando como referencia las pinturas de diversos pintores chilenos que retrataron los paisajes del Valle Central durante la primera mitad del siglo XX.
LITERATUA CONSULTADA
1 La Fundación Santiago Cerros Isla es una organización sin fines de lucro que busca valorizar, integrar y aprovechar los elementos naturales del paisaje de Santiago para mejorar la calidad de vida de la ciudad. Tienen como primer fin recuperar 26 cerros islas ubicados dentro del área urbana de Santiago, consolidándolos como espacios recreativos de uso público. Descubre más en http://www.santiagocerrosisla.cl/
2 Concepto desarrollado en geografía y ciencias sociales para reflexionar acerca del rol que juegan los significados inscritos en el paisaje en contextos de transformación urbano-rural.
3 Concepto propuesto por Forman (1995) que consiste en utilizar pequeños parches (en este caso los cerros isla) como zonas intermedias que permiten conectar el paisaje entre dos grandes superficies, en este caso la Cordillera de Los Andes y la Cordillera de la Costa.