Casa TO

Descubre como la estética y la funcionalidad conviven en armonía con el medio ambiente mientras generan un bajo impacto en la naturaleza por medio de la sencillez, en el hotel design Casa To por Ludwig Godefroy.

Ubicado en La Punta Zicatela, destino denominado como la capital nacional del surf, frente a la Comunidad Ecológica Punta Zicatela y a 15 minutos del aeropuerto de Puerto Escondido, Casa TO surge con la misión de cristalizar la primera experiencia de hospitalidad design en la zona con un espacio que se integra armónicamente al entorno con su contundente materialidad cruda y absoluto respeto por la naturaleza.

Su nombre refleja su esencia contemplativa, pues nace de una reflexión a partir de los conceptos de casa y templo, una dualidad que se resume en la idea de Casa TO, Templo Oaxaqueño. Su impronta sensorial se hace patente al colmar los sentidos con vistas verdes, sonidos naturales y la tranquilidad que invitan a la observación imperturbable.

El hotel design cuenta con nueve suites de elegancia conceptual con una atmósfera que apuesta por la sobriedad de la sencillez. En la planta baja se encuentran seis suites con terraza independiente, mientras que la planta alta se distribuye entre tres suites con tina exterior. La disposición de las habitaciones privilegia la privacidad, al hacerlas imperceptibles desde el exterior.

Vista del interior de la habitación / Interior view of the room
Fotografía / Photography: Arturo Gómez

El proyecto se comisionó al reconocido Arquitecto Ludwig Godefroy, quien trabaja insignemente con materiales crudos, honestos y expuestos. La identidad de Casa TO está inspirada por la arquitectura musulmana, como Yerebatan Sarayı (Cisterna Medusa en Estambul), y por las reservas de agua subterráneas como Finsbury Park Reservoir, en Londres.

La intención principal de Casa TO es crear un oasis interior en el que la privacidad y el espacio personal generen una experiencia radical en una superficie de 600 m2, donde solamente la presencia física pudiera explicar las dimensiones, la distribución y la surrealidad de una estructura que provoca una sensación de complejidad.

Vistas de la piscina / Views of the pool
Fotografía / Photography: Izquierda: Aristeo García Derecha: Nicole Arcuschin

La estética del hotel se define por su sencillez, en la que conviven lo tradicional y lo contemporáneo, que se logra a través del empleo en armonía de elementos simples como el acero, el concreto, la arcilla y la madera.

Casa TO busca que la estética y la funcionalidad convivan en armonía con el medio ambiente y generen un bajo impacto en la naturaleza. Desde el inicio se planteó la instalación de una planta de tratamiento de aguas, que permite reutilizar el agua al 100 % para el riego de áreas verdes.

Para esto, se recurrió a las soluciones de la empresa mexicana TIM, especializada en el tratamiento de aguas residuales, que utiliza procedimientos biológicos para poder reutilizar el agua en riego, sanitarios y otro tipo de consumo de agua no potable. Los sólidos biológicamente estabilizados que se obtienen de este proceso pueden ser utilizados en compostas o para el mejoramiento de suelos.

Además, se planea que en una segunda etapa se implemente un sistema eléctrico adaptado para almacenar energía con paneles solares, reforzando así el compromiso con el medio ambiente.

Terraza interior / Interior terrace
Fotografía / Photography: Camila Jurado

De igual manera, el hotel posee una política de cero plásticos, por lo que se ofrece agua filtrada y se promueve el uso de termos individuales para cada huésped. El plástico que llega de la parte de proveedores o huéspedes se reutiliza y se privilegia el uso de productos biodegradables a granel.

En las amenidades también se hace tangible su compromiso, al disponer de toallas de alberca y playa fabricadas con materiales reciclados. Los artículos de baño son de origen natural a base de caléndula, planta milenaria utilizada por la cultura maya e hindú por su poder regenerativo y terapéutico. Estos productos de la marca mexicana For All Folks son veganos y libre de parabenos, minerales y crueldad animal.

La sobria sencillez del diseño interior, a cargo de Daniel Cinta, cofundador de Casa TO, tomó como punto de partida una paleta de colores inspirada en la vegetación original del terreno. En éste existía una palma Bismarckia nobilis y una puerta de herrería del mismo tono verde, lo que llevó a definir un matiz similar para las herrerías, lámparas y detalles del espacio.

Interior mostrando detalles de muebles y herrerías / Interior showing the details of furniture and wrought-iron elements
Fotografía / Photography: Camila Jurado

Las griferías y accesorios se seleccionaron en acero inoxidable cepillado para que se difuminaran entre los tonos de concreto y, a su vez, asignarle a la cristalería y textiles el protagonismo con una gama compuesta por amarillos, verdes y azules.

Para el mobiliario, se buscó dar una sensación de lujo a través del contacto con elementos simples y honestos, por ello el mobiliario fue seleccionado de entre las propuestas de artesanos de distintos estados del país, como Puebla, Guadalajara y Oaxaca, quienes adaptaron sus diseños y colores exclusivamente para el hotel.

Detalles de herrería y vegetación / Wrought-iron and vegetation details
Fotografía / Photography: Arturo Gómez

Por último, el paisajismo se concibió para generar un lento proceso de apropiación de la naturaleza sobre la arquitectura con enredaderas que fueran desapareciendo el concreto desde el exterior. En el interior se creó una jungla con árboles frutales como plátano y maracuyá y plantas seleccionadas de los viveros de la zona.

Liderado por Gisela Kenigsberg y Daniel Cinta, cofundadores de Casa TO, la expectativa consiste en que a mediano y largo plazo se perciba la sensación de estar en una ruina abandonada, tomada por la exuberante vegetación que da forma al espacio.

Disfrutando de la naturaleza / Enjoying nature
Fotografía / Photography: Arturo Gómez