ARQ. PSJ. IVÁN JUÁREZ

Arquitecto y paisajista, trabaja entre la intersección de la práctica y la investigación, a través de una amplia variedad de medios y escalas. Maestría en Arquitectura del Paisaje por la Universidad de Corvinus en Budapest, Hungría. Fundador y director de x-studio. Ha desarrollado una gran variedad de proyectos en diversos países de América, Europa, África, Asia y Australia. Ha obtenido diversos premios y reconocimientos, entre los que destacan la Bienal Latinoamericana del Paisaje, el Architectural League Prize de Nueva York, el Premio Internacional de Arquitectura otorgado por el Centro Europeo de Arquitectura, Arte, Diseño y Estudios Urbanos, el premio Architectural Record / Design Vanguard, y el Grand Prix Award en la Exhibición Internacional de Arquitectura del Paisaje de Belgrado.

Fotografía: Iván juárez

¿CUÁL HA SIDO EL PRINCIPAL DESAFÍO CUANDO HAS DISEÑADO UN PROYECTO CERCA DEL OCÉANO?

La singularidad y biodiversidad del paisaje costero, territorio interconectado a través de diversos ecosistemas acuáticos y terrestres, lo identifican como un entorno sumamente frágil de gran valor ecológico, social, estético y patrimonial. Sin embargo, en las últimas décadas, debido a la intensa actividad turística, a la acelerada ocupación y utilización de sus áreas y recursos naturales, y a la excesiva edificación a lo largo de la costa, ha propiciado que el carácter natural y cultural de este territorio haya sido sumamente afectado y degradado.

Así mismo, la mayoría de los proyectos urbanos y turísticos desarrollados en las zonas costeras, con intereses meramente económicos y prácticas tematizadas que se reducen a sol y playa, han ocupado, privatizado y monopolizado casi la totalidad de los frentes costeros de nuestro país, limitando no solamente el movimiento y transición de su biodiversidad, sino la experiencia y contacto físico-visual de los habitantes locales, negándole su carácter público, como un bien yderecho común para la población en general.

En este sentido, uno de los mayores desafíos no solamente de manera particular sino para nuestra disciplina en general, consiste en generar acciones y espacios de concientización, reflexión, difusión y resiliencia que permitan repensar nuevas maneras de coexistir con este paisaje, y en el que podamos cohabitar de manera armónica con las diversas especies que lo habitan, respetando sus propias dinámicas naturales. Que podamos imaginar nuevos enfoques para intervenir -o no intervenir- en este contexto, generando estrategias paisajísticas y medioambientales que respondan a su sensibilización y valoración.

Pabellón de luz, Brasil
Fotografía: x-studio, Iván Juárez

¿QUÉ CONSEJOS NOS DARÍAS SI QUISIÉRAMOS DISEÑAR UN PROYECTO DE PAISAJE EN LA COSTA?

Me parece importante que los proyectos de intervención que se generen en el paisaje costero propongan una mirada integral en la que se fomente el conocimiento, la preservación y regeneración de sus ecosistemas. Resignificar su esencia e identidad, como un paisaje sensible y sostenible, escenario natural que propicie la cohesión ecológica y social.

Así mismo, considero muy significativo el colaborar de forma multidisciplinar con profesionistas de disciplinas sociales y medioambientales, tales como biólogos, oceanógrafos o ecólogos, y de esta manera plantear de forma conjunta, premisas y políticas integrales-regenerativas que promuevan prácticas de bajo impacto ambiental, que fomenten la transmisión de saberes, así como la participación de la población local en los procesos de diseño y gestión. Se debe de proponer acciones e intervenciones paisajísticas generadas desde la propia naturaleza que puedan incidir positivamente en el entorno natural y de forma paralela beneficien cultural, social y económicamente a los pobladores locales, entendiendo este paisaje como dominio público.

A partir de estos enfoques, es importante replantear el modelo turístico existente, limitar las edificaciones sobre terrenos costeros, propiciando corredores ecológicos que promuevan la migración y conservación de flora y fauna, así como la limitación del uso de sus recursos hídricos y naturales.

Cartografía de los Sentidos, Mallorca
Fotografía: x-studio, Iván Juárez

En términos de diseño, al intervenir en un paisaje costero es importante sensibilizarse con sus propias dinámicas naturales. Con los factores tangibles e intangibles que forman parte de su esencia. Al igual que aprender de sus sistemas biológicos y físicos como la mejor herramienta para crear y dialogar con él.

Escúchalo, sin tratar de modificar o controlar sus procesos biológicos, su dinamismo o espontaneidad. Es importante tratar que la naturaleza juegue su propio papel, como un organismo vivo e interconectado en constante evolución del que solo somos una pequeña parte.

Baja-Mar, Espejos del Cielo, Brasil
Fotografía: x-studio, Iván Juárez

¿QUÉ CARACTERÍSTICAS DEBEN DE TENER LAS ESPECIES VEGETALES EN UN PROYECTO QUE SE LOCALIZA EN LA PLAYA?

El paisaje litoral se caracteriza por ser uno de los ecosistemas con mayor plasticidad natural. Un paisaje de transición entre agua y tierra sumamente dinámico, en el que la sucesión y suma de acontecimientos efímeros evocan escenarios en constante transformación. Al pensar sobre sus especies vegetales, es importante percibirlo y comprenderlo desde un sentido holístico, a lo que me refiero es:

• Observar y conocer las dinámicas y procesos que genera la propia naturaleza. Entender sus ciclos naturales y su esencia autoregenerativa. Ser sensible a su ritmo, sonoridad, a su plasticidad, a su propia temporalidad.

• Comprender los fenómenos naturales como parte de su esencia y complejidad. El viento, la brisa, la lluvia, las tormentas, hasta los propios huracanes.

Creo que sería esencial el preguntarnos si las comunidades que habitan nuestro litoral marino pueden convivir de manera armónica y segura con el ser humano. ¿Cómo hacer esto posible y, repensar el paisaje de la costa desde una mirada biocéntrica y no antropocéntrica?

Proyecto de intervención paisajística y arquitectónica, Caribe Mexicano, detalle fauna
Fotografía: x-studio, Iván Juárez

• Ser perceptible a sus cambios transitorios y estacionales. La naturaleza descansa, reposa, se agitay se autoregenera. A la intensidad de luces, los ciclos lunares, la marea, el oleaje, el horizonte infinito y cambiante.

• Entender el temperamento del paisaje que se expresa de diversas maneras, algunas veces en completa calma y algunas otras revelando su fuerza e impetuosidad. La fuerza violenta del mar. El escenario marino hace presente el poder de la naturaleza sobre el ser humano.

• Ser perceptible a la manera en que se expresa el cielo. Noche y día. Reconocer las diferentes densidades, formas, movimientos y tonalidades de las nubes. Por ejemplo, ¿cuándo nos anticipan una tormenta? Comprender los diversos factores que lo determinan, tales como la humedad, la salinidad, la temperatura.

• Comprender su importancia como lugar-frontera. Líquido-sólido. Lugar de intercambio y transición físicabiológica. Entender que cada elemento u organismo que lo conforma, independientemente de su escala, micro o macro, es fundamental para su propio equilibrio y forma parte de un todo, y como cada uno de ellos, se adapta e interactúa aprovechando positivamente las condiciones e inclemencias del entorno.

Proyecto de intervención paisajística y arquitectónica, Caribe Mexicano
Fotografía: x-studio, Iván Juárez

  • Reconocer el papel que juegan cada uno de sus ecosistemas, y como cada uno de ellos, además de ser hábitat de especies únicas, funcionan como parte de un sistema interconectado a través de diversas capas y procesos naturales. Por ejemplo:
    – Los arrecifes marinos actúan como barreras naturales decreciendo el oleaje.
    – Las dunas costeras actúan como barrerasfiltro que disipan la energía de mareas de tormenta y disminuyen vientos o huracanes, además de que su vegetación ayuda a fijar el sustrato previendo la erosión e impidiendo que la arena se interne tierra adentro.
    – Los manglares, son filtros biológicos que regulan el nivel del agua, controlando mareas e inundaciones.
  • Entender cómo los sistemas acuáticos, marinos y costeros, dependiendo de su localización geográfica, se interrelacionan con sus respectivos sistemas terrestres, ya sea selvas, bosques, tundras o desiertos.
  • Identificar y conocer las especies endémicas del contexto local, así como las condiciones que requieren para su crecimiento. Una vez identificadas, proponerlas como parte esencial del proyecto paisajístico, evitando utilizar vegetación ajena al propio entorno. Al proponer especies nativas, además de reducir riego y mantenimiento, ayudará a restaurar los ciclos biológicos, beneficiando positivamente la biodiversidad del paisaje local.

Paisajes líquidos, Costa del Caribe Mexicano. Proyecto de investigación, estrategias y propuestas paisajísticas
Fotografía: x-studio, Iván Juárez