Ya’ax en el paisaje yucateco: percepción y toponimia

Héctor S. Durán Castillo y la arquitecta paisajista A. Marianela Porraz Castillo, nos platican sobre el Ya’ax (verde maya).

La cultura es un ente poderoso que se transmite a través de la gente y sus prácticas. Sin embargo, hay algo que sólo es perceptible en los paisajes y que se cuela en nuestros sentidos: lo vemos en las carreteras, en los senderos, o incluso, en donde éstos se desvanecen en el horizonte. En la región maya, como en otras culturas agrícolas, el olor a tierra mojada trae casi siempre un buen augurio. Durante la temporada de lluvias, que va de la segunda mitad de mayo a noviembre, podemos palpar el verde intenso a través del aroma a humedad y madera, junto con la sensación de lluvia y calor que va calando la piel.

La cultura maya ha convivido con su entorno desde hace milenios, creando en su lenguaje figuras simbólicas, no sólo para darles nombre a éste y otros fenómenos, sino también para dar cuenta del poderoso vínculo de la naturaleza con su imaginario y sus estructuras sociales. Según Mercedes de la Garza y Élodie Dupey García en la cosmogonía de los mayas prehispánicos, el plano terrestre se encontraba dividido en cuatro rumbos, cada uno ligado a un color, a los signos del calendario ritual y a los bacab’oob (pilares del mundo). En el centro, fungiendo como el eje se encontraba la “ceiba madre”, de color verde (ya’ax)¹.

El entorno del poblado de Santa Elena, Yucatán
Fotografía: Héctor S. Duran Castillo

Esta forma de concebir el espacio y las asociaciones cromáticas forman todavía parte importante de las tradiciones rituales de los pueblos mayas². Ya´ax³ o yax, en el maya yucateco, es una palabra compleja y polisémica que podemos encontrar definida en los diccionarios como lo “verde”⁴, pero que también puede significar un color azul⁵ intenso, relacionado con el agua. Para entender la importancia de esta palabra hay que tener en cuenta que, en la cosmogonía maya, el gran árbol sagrado de la ceiba conectaba el cielo, la tierra y el inframundo⁶. Es así como la palabra ya’ax remite al agua como fuente de vida, así como a una conexión metafísica entre lo terrenal y lo divino. Cabe mencionar que el árbol sagrado de la ceiba lleva todavía por nombre Ya’axché⁷ o Yaxché. Asimismo, no es una coincidencia que varias poblaciones o sitios en el estado tengan en alguna parte de su nombre tal término, como, por ejemplo: Yaxcopoil (“Lugar de los álamos verdes”), Yaxché de Peón (“ceiba de Peón”), Yaxcabá (“lugar de tierra verde”), entre muchos otros. Esta extensa toponimia entrelaza el color verde-azul con términos conceptuales y geográficos, que nos hace comprender cómo gracias a la riqueza del lenguaje podemos acercarnos a la relación de lo humano con el medio y con el plano espiritual.

Vista de los alrededores del poblado de Ixil
Fotografía: Héctor S. Duran Castillo

Sistema de riego y caminos cubiertos de vegetación
Fotografía: Héctor S. Duran Castillo

Al ya’ax se le encuentra en la imponente selva de las tierras bajas, donde hasta el sol ve difícil su entrada, al cual percibimos desde la altura como un intenso “mar” de frondas. Lo vemos en cavernas y cenotes, en donde la luz revela la transparencia y el color azul intenso de sus aguas. Podemos también observar dicho color en la arquitectura, donde el musgo se funde con la piedra, la madera o la tierra que se utiliza para construir edificaciones. Nos da la impresión de que los edificios se levantan como troncos, en donde lo verde es la tierra fértil. Sus muros reciben el abrazo implacable del paso del tiempo y de la vegetación. En el paisaje arqueológico y vernáculo maya el ya’ax convive y envuelve a un gran número de elementos naturales y construidos. Es parte de una forma de vida, de una sensibilidad, de un rico patrimonio cultural y natural, el cual deberíamos comprender, valorar y respetar.

Interior de la nave central de la capilla de la hacienda de Tabi, Yucatán
Fotografía: Héctor S. Duran Castillo

¹ De la Garza, Mercedes, “Cosmovisión de los mayas antiguos”, Ciencias, numero 18, 1990, https://www.revistacienciasunam.com/es/166-revistas/revista-ciencias-18/1490- cosmovisi%C3%B3n-de-los-mayas-antiguos.html

² Como, por ejemplo, en las creencias de los mayas kaqchikel. Ver: Urdapilleta Carrasco, Jorge, et Kajkan Felipe Mejía Sepet. “El bastón rojo se sostiene: conocimiento cultural del pueblo kaqchikel”. Revista Pueblos y fronteras digital 10, no19 (1 juin 2015): 109. https://doi.org/10.22201/cimsur. 18704115 e.2015.19.47.
³ En algunos nombres de lugares y de cosas, podemos encontrar palabras con la ortografía yax.
⁴ Juan R. Bastarrachea, Ermilo Yah Pech, Fidencio Briceño Chel, Diccionario Básico Español-Maya-Español, consultado en línea el 15 de agosto de 2021. https://www.mayas.uady.mx/ diccionario/y_maya.html

⁵ Sanja Savkic, “El léxico cromático y la ideología maya”, Estudios de cultura maya, 37, p. 99-119, 2011, recuperado en 17 de agosto de 2021, de http://www.scielo.org.mx/scielo. php?script=sci_arttext&pid=S0185-25742011000100004&lng=es&tlng=es.
⁶ De la Garza, Mercedes, “Cosmovisión de los mayas antiguos”,…op. cit.
⁷ Juan R. Bastarrachea et al., Diccionario Básico Español-Maya-Español, op. cit.