Restauración y acondicionamiento paisajístico del Puente de Piedra en Bustarviejo, Madrid

El Puente de Piedra de Bustarviejo se encuentra en un espacio natural de gran belleza de la Sierra Norte de Madrid.

Por: David Sánchez y Carmen Bueno

Forma parte de una red de senderos que lo conectan con el núcleo rural de Bustarviejo, muy frecuentado por senderistas y cicloturistas, quienes se ven atraídos por el paisaje cultural de un enclave de indudable atractivo paisajístico y monumental. 

Construido a principios del siglo XX en mampostería, sillería de granito y bóvedas de ladrillo, el Puente de Piedra es un pequeño exponente de la tipología de puentes de sillería de mitad del siglo XIX en España.

En los años 80, tras el desvío de la carretera hacia un viaducto de nueva construcción, el puente quedó en lamentables condiciones de abandono, su estructura había quedado prácticamente sepultada por los sedimentos del arroyo. 

PRIMER ETAPA

La primera etapa, consistió principalmente en la restauración del monumento. Primero se realizaron las excavaciones con el objetivo de retirar parte de la tierra en el cauce, además de las gruesas capas de asfalto y hormigón de la parte superior de la vía.

Posteriormente, se restauraron las caras de las paredes, realizándose una ligera limpieza de las zonas de piedra y reparando los materiales dañados, principalmente morteros y ladrillos.

Las piezas perdidas del pretil fueron reemplazadas con nuevos sillares tallados en granito blanco que reproducen su forma original.

Finalmente, se pavimentó de nuevo el tablero usando mezcla de cemento y cal para sustituir el asfalto. 

Primera etapa de la intervención.
Fotografía: David Sanchez

Acceso al puente. Fotografía: David Sánchez

SEGUNDA ETAPA

La segunda fase se realizó con la finalidad de mejorar las condiciones ambientales en el entorno del puente.

Se realizó una importante excavación en el cauce del arroyo que, posteriormente, requirió de una reconfiguración de los taludes de las riberas del arroyo y el acondicionamiento ambiental de su entorno próximo.

También fue necesario proceder a la construcción de un dique, con el objetivo de contener el avance de los sedimentos, situación que se presentaba extremadamente agresiva para el paisaje.

Plataforma de descanso para mirar.
Fotografía: David Sánchez

Fotografía: David Sánchez

Planteamos la creación de dos espacios de estancia desde los que se pudiera contemplar el puente y el paisaje circundante. Uno fue realizado junto al camino y otro junto al arroyo que, con el sendero de acceso, debía permitir la integración del nuevo dique de piedra en la actuación paisajística.

Detalles de la plataforma de descanso. Fotografía: David Sánchez

La solución arquitectónica consistió en insertar en el lugar una serie de elementos que, de manera rotunda, pudieran integrarse como piezas de una obra de “Land Art” y que, gracias a su simplicidad y rapidez de montaje, permitieran reducir los costos al mínimo.

Constructivamente todos los elementos responden a un mismo sistema realizado casi exclusivamente con eco-traviesas de madera.

Por economía de medios, y de tiempo, las variantes del sistema se basan en las distintas posiciones de las piezas, colocadas unas veces de canto y otras de costado; apiladas o contrapeadas.

Naturaleza creando matices de una obra en constante evolución. Fotografía: David Sánchez

Ese material rudo, desnudo, de piezas de madera sobre el lecho del arroyo, era una de las imágenes intuitivamente buscadas, posteriormente comprendimos que en realidad se trataba de un trabajo incompleto: le tocaba ahora a la naturaleza continuar el proceso, deslavar la madera, retorcerla, astillarla, incrustarla de líquenes y sacar todos los matices posibles de una obra en constante evolución.